El pasado 15 de junio fue inaugurada en la galería Factoría Habana la exposición Convergencias, que mostrará al público una selección de piezas y documentos de los diseñadores industriales cubanos Gonzalo Córdoba y Luis Ramírez.

La labor de los talleres de producción

Convergencias, concebida en torno al rol de los talleres de producción en la creación artística, constituye un primer punto de confluencia en el trabajo de estos dos diseñadores de amplia trayectoria.

En estos talleres se produjeron las mejores obras de Gonzalo Córdoba entre los años 1970 y 1990 y las de Luis Ramírez a partir de los años 1990.

Planos, diseños en 3D, prototipos, fotografías, publicaciones, objetos de arte y de uso cotidiano, mobiliario e instalaciones servirán de hilo conductor para mostrar la variedad y la riqueza de una profesión desarrollada por dos creadores de diferentes generaciones que han desplegado y adaptado su actividad diseñística en ámbitos tan diferentes como el diseño de interiores, de mobiliario, de iluminación o de cerámica.

Dos diseñadores, un concepto

Otro elemento común en el trabajo de estos dos diseñadores es la influencia decisiva del entorno cubano en sus obras, tanto a los componentes etnográficos (conductas, necesidades, ergonomía, etc.)., como a los factores materiales (clima, temperatura o materiales).

En entrevista a la revista Arte por Excelencias, Luis Ramírez, Vicepresidente de la Fundación Caguayo y gestor del proyecto Conga Arte & Diseño, habla de su visión sobre el trabajo de Gonzalo: “Él siempre tuvo muy claro que estaba diseñando para Cuba y por lo tanto debía respetar cada uno de los elementos que componen nuestro país, por ejemplo: el clima, la temperatura, los símbolos, las costumbres, la iconografía, los materiales con los que contamos (en muchos casos naturales), las técnicas que poseemos que básicamente son la experiencia del oficio de muchos años y no tanto la tecnología. Mis principios han sido los mismos. Desde que estaba en el instituto investigué todo lo que estaba a mi alrededor y encontré a dos personas fundamentales que coincidían con mi forma de pensar, uno era Gonzalo Córdoba y la otra Clara Porset. Esta última también diseñadora cubana de reconocimiento internacional”.

Las piezas trascienden la forma o el uso para convertirse en elementos transmisores de la cultura cubana.

En una entrevista concedida a la revista Vistar, al hablar sobre su premiada colección de piezas de porcelana, Luis dice: “Son los cubanos los que están en mi colección. Lo que veo cuando salgo a la calle y me inspira, es lo que moldean mis manos en el taller. Me cuesta mucho no pensar en esa soltura del cubano, en ese aire que tienen las mujeres cuando caminan. La caña de azúcar, está en mis piezas…“.

La exposición Convergencias constituye una idea original de la Dra Concha Fontenla y está auspiciada por la Fundación Caguayo. La muestra estará abierta durante tres meses.

www.luisramirez.com

Factoría Habana, O’Reilly 308, entre Habana y Aguiar.

Adaptado del texto de la Dra Concha Fontenla para la invitación de la exposición.

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